Seguir a Cristo
Seguir a Cristo
Cuando alguien se plantea seguir a Cristo, surgen las dudas. ¿Qué es seguir a Cristo? El empeño de san Ignacio de Loyola por ir a Tierra santa y procurar por todos los medios visitar determinados lugares y vivir del modo más parecido posible al modo en el que vivió Jesús de Nazaret es más común de lo que podría pensarse. Solo que san Ignacio lo llevó a la práctica, mientras que los demás nos limitamos a desearlo.
Para la mayoría de las personas esto ni siquiera es posible. Una determinada forma de vida, menos aún, una forma de vida tan extrema, no es universalizable. Y, lo que es más importante, tal mimetismo no garantizaría un verdadero seguimiento. Porque lo que marca la diferencia es cumplir la voluntad de Dios.
Aquí pueden aplicarse las palabras de san Pablo sobre la caridad. Por muchas heroicidades que yo haga, si no tengo amor, no me sirve de nada (cf. 1 Cor 13).
Seguir a Cristo es entregar la vida en las manos del Padre, como hizo Cristo. Seguir a Cristo no es imitar gestos externos, es ser otro Cristo. Es tener el espíritu de Cristo. Es dejarse amar por Dios, es buscar su voluntad en todas las cosas.
Quizá sea la humildad uno de los temas más difíciles de tratar. Ni el propio santo Tomás de Aquino, tan claro en la exposición de otras virtudes, logra una definición satisfactoria de la misma (cf. Suma de Teología II-II, q. 161). ¿Cómo llegar a ser humilde? Una falsa concepción de la humildad Con frecuencia se […]
LA VIRTUD CRISTIANA DE LA HUMILDAD Leer más »
Conocimiento interno del Señor, es el encuentro de nuestro ser más íntimo con la persona misma del Resucitado. Es intimidad y es búsqueda. Es personal e intransferible. Va mucho más allá de la doctrina o de las prácticas religiosas. No es consuelo, sino aguijón y, sin embargo, es lo único que puede llenar nuestro corazón
CONOCIMIENTO INTERNO DEL SEÑOR Leer más »